Cuando hablamos de darle una nueva apariencia y funcionalidad al hogar, es lógico hacer referencia a una reforma integral de casa, porque mediante este proceso es posible lograr el objetivo.
Sin embargo, con otro tipo de proceso es posible de lograrlo también, y cultivar mango es una curiosa a la que cada vez más personas apuntan.
Contar con un árbol de mango es obtener precisamente una imagen más bonita, y más funcionalidad, porque su belleza, su sabor dulce, textura jugosa y aroma único lo convierten en una delicia.
Mango: una fruta codiciada
Originario del sur de Asia, el mango ha ganado popularidad global gracias a su versatilidad y beneficios para la salud. Esta fruta es rica en vitaminas A, C y E, además de antioxidantes que ayudan a fortalecer el sistema inmunológico y mejorar la salud de la piel en general.
También se debe destacar que es una excelente fuente de fibra, convirtiéndola en un aliado ideal para una buena digestión.
Su cultivo no solo ofrece la posibilidad de disfrutar de frutos frescos, sino también de contribuir al embellecimiento del entorno con un árbol que puede alcanzar hasta 30 metros de altura.
Lugares ideales para sembrar mango
El árbol prospera en climas tropicales y subtropicales, porque necesita temperaturas cálidas, ideales entre los 24 y 30 grados Celsius, y no tolera bien las heladas.
Por ello, es importante elegir un lugar con inviernos suaves y poca posibilidad de fríos extremos, para que lo plantes por tu cuenta o las exijas con base con reformas de dúplex.
La exposición solar es otro factor clave, ya que este requiere al menos ocho horas diarias de luz solar directa para crecer y producir frutos de calidad. Asimismo, si el suelo de tu región es arcilloso o demasiado compacto, puedes mejorarlo con materia orgánica o arena para garantizar un drenaje adecuado.
¿Cómo sembrar el mango correctamente?
Seguir un proceso adecuado al sembrar el mango, es crucial para asegurar que el árbol crezca sano y vigoroso:
- Elige la variedad adecuada. Existen muchas variedades de mango, desde las más dulces hasta las más ácidas. Investiga cuál se adapta mejor al clima de tu región y a tus preferencias.
- Semilla o plántula saludable. Si optas por una semilla, es clave extraerla de un mango maduro y limpiarla bien. Del mismo modo puedes adquirir plántulas en viveros, lo que acelera el proceso de cultivo.
- Prepara el lugar de siembra. Excava un hoyo de al menos 60 cm de ancho y profundidad, apartando la tierra para usarla luego, mejor si se mezcla con compost.
- Planta la semilla o plántula. Coloca la semilla con el lado más plano hacia abajo y cúbrela con una capa fina de tierra, sin compactarla demasiado. Si usas una plántula, procura de que el cuello de la raíz quede a nivel del suelo.
- Riega con moderación. Tras plantar, riega suavemente para asentar la tierra, pero sin exagerar porque si se encharca la tierra, no es lo más adecuado. La idea es solamente que el suelo se mantenga húmedo.
- Protege la planta joven. Durante las primeras semanas, protege la planta de vientos fuertes y plagas colocando una malla o estructura alrededor, y si es posible embellece el jardín con reformas en el lugar como las que hallas con nosotros en Reformas.co.
Consejos de cuidado de árbol de mango
Una vez sembrado, el árbol requiere atención y cuidados constantes para asegurar un crecimiento saludable:
- Riego adecuado. El riego cambia, siendo ideal hacerlo de manera regular los primeros años, más en la temporada de sequía, y reduciendo la frecuencia en la medida en que la planta se convierte en un árbol más establecido.
- Fertiliza correctamente. Aplica fertilizantes ricos en nitrógeno, fósforo y potasio durante la época de crecimiento.
- Pode el árbol regularmente. La buena poda estimula la producción de frutos, así que retira ramas muertas, dañadas o enfermas y aquellas que crezcan hacia el interior del follaje.
- Controla plagas y enfermedades. Vigila signos de plagas como cochinillas, ácaros y moscas de la fruta. Utiliza soluciones orgánicas o productos químicos según sea necesario en este y plantas alrededor como los Geranios, u otros, porque ninguna está exenta de que las plagas las invadan.
- Protege durante heladas. Si existe riesgo de heladas, cubre el árbol con plástico o tela para protegerlo del frío extremo.
- Monitorea la floración. Durante la floración, procura que el árbol reciba suficiente agua y nutrientes. Un manejo adecuado en esta etapa es clave para obtener una buena cosecha.
- Cosecha en el momento adecuado. Los mangos deben cosecharse cuando están maduros, pero antes de que caigan del árbol.
- Evita el exceso de fertilizantes. Una sobrefertilización puede dañar las raíces o afectar la producción de frutos. Sigue siempre las dosis recomendadas.