El bambú es una planta exótica bien presente en regiones tropicales, la cual muchas veces se usa como material para agregar en distintas decoraciones, pero del mismo modo, es posible tenerla como planta.
Gusta tanto que suele pedirse su inclusión en decoraciones de espacios del hogar, o hasta en el proceso de reformas, sea de reforma de chalet u otras de la mano de empresas de reformas.
Si deseas contar con este, es entendible, pero para mantener su belleza y vitalidad, es esencial conocer los cuidados básicos que esta planta necesita.
Bambú: una planta sinónimo de suerte
No muchos lo saben, pero el bambú es considerado un símbolo genial con el que contar porque se piensa que atrae buena suerte y energías positivas. En el feng shui, por ejemplo, se cree que contar con este en casa atrae prosperidad y armonía.
Esta planta, además, se asocia con la resistencia y la flexibilidad, ya que puede soportar condiciones adversas y seguir creciendo con fuerza. Embellece entonces el espacio, y claro, crea un ambiente con una buena atmosfera que se debe apuntar a conservar bien.
Cuidados para mantener un buen bambú
Si deseas que la planta central luzca siempre verde y saludable, sigue estos cuidados que se consideran los más básicos de todos:
- Elección del lugar adecuado. Aunque puede tolerar poca luz, crecerá mejor con una cantidad moderada de luz solar filtrada, por ende, ponla indirecta.
- Riego adecuado. Si tienes bambú en agua, cambia el agua cada semana, pero si es en tierra, no empapes el suelo para que pueda absorber correctamente la misma sin que le afecte.
- Tipo de agua. Utiliza agua destilada o libre de cloro, ya que es sensible a los productos químicos que se encuentran en el agua del grifo.
- Sustrato y drenaje. Si está plantado en tierra, usa un sustrato ligero y bien drenado. Chequea que la maceta tenga agujeros suficientes que drenen fácil si es mucha agua.
- Fertilización. Usa un producto fertilizante una vez al mes, que sea uno equilibrado para plantas de interior o específico.
- Poda regular. Retira hojas o tallos amarillos para estimular un crecimiento saludable y evitar que las plagas se acumulen.
- Humedad ambiental. El bambú prefiere un ambiente húmedo, por ende, si vives en un lugar seco, pulveriza agua sobre sus hojas de vez en cuando.
- Temperatura ideal. Mantén el bambú a temperaturas entre 18 y 25 °C, siendo mejor un punto medio para no irse a los extremos en cuanto a temperatura.
- Rotación de la maceta. Gira la maceta cada pocas semanas para que todos los lados reciban luz y crezca de manera uniforme.
Enfermedades comunes y soluciones
Tal como sucede con muchos tipos de plantas, tal es el caso de la albahaca, el bambú puede estar expuesto a ciertas enfermedades, y claro, plagas que las dañan.
Por suerte, cada problema de este tipo tiene solución, las cuales señalaremos y debes aplicar porque hacen parte de los cuidados para mantenerlo saludable:
Hojas amarillentas
El color más saludable de las hojas es el verde típico del bambú, por ello si están amarillentas significa que tienen exceso o falta de riego, luz insuficiente o acumulación de cloro en el agua. Si es el caso, solo ajusta el riego, proporciona luz adecuada y utiliza agua filtrada o destilada.
Pudrición de raíces
Si las raíces no están bien, quizás el origen de ello sea el encharcamiento o drenaje inadecuado. Revisa el sustrato y procura que la maceta tenga buenos orificios de drenaje. Trasplanta si es necesario a un área más grande para no tener más estos problemas, al menos, idealmente.
Pulgones, ácaros o cochinillas
A veces estas se presentan por el ambiente seco o falta de limpieza en las hojas, y sea por esto u otras razones, debes ponerte manos a la obra. Limpia las hojas con un paño húmedo y aplica un insecticida natural, como aceite de neem, si el problema persiste.
Hojas secas o marrones
Su causa es la falta de humedad o exposición directa al sol, pero se solventa fácilmente al pulverizar agua regularmente y proteger la planta de la luz solar directa.
Crecimiento lento
Si has plantado recientemente un bambú, y notas que su crecimiento es lento, quizás se deba a la deficiencia de nutrientes. Fertiliza mensualmente con un producto adecuado para bambú.
Cuidar de un bambú puede ser una experiencia gratificante, ya que no solo embellece cualquier espacio, sino que también aporta serenidad y energías positivas.
Con los cuidados adecuados y atención a los detalles, este sin duda va a prosperar durante muchos años, los cuales te recordamos que podemos añadir sea que quieras hacer una reforma integral de piso, una en el jardín o terraza, o quizás una reforma de oficina.